El Sábado vimos Crueldad intolerable, la película de los hermanos Joel y Ethan Coen, con una fantástica pareja protagonista: George Clooney y Catherine Zeta-Jones.
él es Miles Massey, el mejor abogado matrimonialista de Los Angeles que lo ha conseguido todo en su trabajo y que empieza a aburrirse de su vida. Ella es Marylin Rexroth, una cazafortunas que quiere ser libre e independizarse de los hombres a toda costa. Inevitablemente, los dos acaban encontrándose y el resultado de ese choque es una divertidísima película y una de las mejores parejas cinematográficas actuales.
Quizás para los seguidores de esta pareja de hombres-orquesta del cine (directores, guionistas, productores, montadores, incluso actores!) que son los hermanos Coen, esta película no sea una de las mejores. Puede haber quien diga que hasta es una de las peores, pero es una comedia divertida y con ingenio a raudales. Nos reímos mucho viéndola.
Es una comedia al más puro estilo clásico de Hollywood. Vienen a la memoria películas como La fiera de mi niña de Howard Hawks, Historias de Filadelfia de George Cukor y Arsénico por compasión de Frank Capra. Todas ellas además de ser grandes comedias tienen algo en común, y es que el actor protagonista es Cary Grant. Y no he escogido esas tres películas al azar, sino al contrario, el hecho de que sea Cary Grant es lo que hace que esta Crueldad Intolerable se parezca más a ellas, porque no se puede negar que en esta película George Clooney recuerda más que nunca a Cary Grant.
El parecido físico entre Clooney-Grant salta a la vista y con esta interpretación Clooney se ha convertido en el vivo retrato de Grant. En algunos momentos hay gestos, miradas desorbitadas y reacciones que parecen sacadas directamente de alguna de las tres películas anteriores. Viendo como Clooney borda este tipo de personajes irresistibles y encantadores no es de extrañar que no le importe asumir el papel de «nuevo Cary Grant» en el panorama del cine actual.
Sin duda George Clooney y Catherine Zeta-Jones son lo mejor de la película. Es una pareja con química en la pantalla, los dos están irresistibles y mucha de esa química que desprenden en esta película se la deben a la excelente fotografía de Roger Deakins.
Pero aunque sea la pareja protagonista la que soporta todo el peso de la película , no están ni mucho menos solos ante el peligro, sino que están arropados por una serie de actores secundarios de lujo que aportan algunos de los momentos más divertidos y locos de toda la película. Ahí están Billy Bob Thornton, en el papel de Howard Doyle un millonario de la familia petrolera de los Doyle. O Geoffrey Rush en el papel de Donovan Donaly en esa loca escena que sirve de introducción a la historia. Y Cedric the Entertainer, como el genial detective Gus Petch.
En definitiva, una comedia inteligente con la que pasar un buen rato. Y recuerda que es más seguro pasar un buen rato viendo una buena película, que no exponerte a que te pillen con el culo al aire!